Seguro que con el paso del tiempo has notado algunos cambios en tu cuerpo. Se trata de cambios normales. Al final, a todas nos pasa. No es lo mismo tener 20 años y no haber dado nunca a luz que encontrarnos con 40 o 50 años, más de un parto a la espalda y haber pasado ya a la menopausia. Es por eso por lo que la mujer debe acudir regularmente a una consulta de ginecología para controlar que su salud sigue en buen estado, resolver dudas y poner remedio a los problemas que surgen con el paso del tiempo. ¿Sabes cuáles son? ¿Sabes que muchos de ellos se pueden evitar con el láser ginecológico? Tranquila, que te lo vamos a explicar todo a continuación.
Se habla mucho de que las mujeres perdemos el apetito sexual conforme se acerca a la menopausia. Sí y no. Lo que suele pasar, en la mayoría de los casos, y puede que tú ya lo estés experimentando, es que cuando una mujer se acerca a los 40 años, empieza a notar los efectos de la atrofia vaginal. La atrofia, más conocida como sequedad vaginal es un problema de salud íntima que afecta, y más de lo que pensamos, a las relaciones sexuales, situación que podría traer con el tiempo problemas en la relación de pareja. Y es que la sequedad vaginal, aunque muchas no lo digamos, nos afecta en la rutina diaria, provocando molestias, picores, ardor e inseguridad, y por si fuera poco incide en las relaciones íntimas, haciendo que éstas sean dolorosas por la falta de lubricación.
Seguro que has preguntado muchas veces si esto tiene solución. Sí que existe un remedio para ir recuperando la lubricación natural de la vagina en muy poco tiempo y evitar esos picores, ardones e incomodidad que sientes. Te explicamos, existe una técnica que empleamos en Clinimur, que alivia los problemas que sufre la vagina con la edad y ese es el láser ginecológico.
La vagina de una mujer de 25 años tiene mucho colágeno y un epitelio grueso, lo que ayuda a mantener la zona humectada. Sin embargo, con el paso de los años, o debido a los cambios hormonales, el epitelio se vuelve mucho más delgado y produce menos colágeno, lo que provoca que las relaciones sexuales sean dolorosas, e incluso que produzcan sangrado, siendo además más vulnerables a las infecciones. El láser incide en el tejido de la mucosa vaginal estimulando la producción de colágeno y restableciendo el flujo sanguíneo en dicha zona. Tras su uso, verás cómo mejoran las relaciones de pareja. Recuperarás tu confianza íntima y dirás adios a las molestias.
La terapia con láser la empleamos no solo para paliar la atrofia o sequedad vaginal, sino para la incontinencia urinaria de carácter leve y moderado, que también sufren muchas mujeres con la edad. En este sentido, lo que hace el láser es estimular el colágeno y las fibras que se encuentran en la pared vaginal anterior y la región periuretral. ¿Cuál es el resultado? Favorece la contracción y endurecimiento del tejido de la mucosa vaginal, por lo que se consigue dar un mayor apoyo a la vejiga para que ésta recupere la función normal.
Aparte de eso, el láser ginecológico también se emplea para disminuir las infecciones en esa zona al normalizar el pH y la flora vaginal.
Sin dolor y muy rápido
¿Me dolerá? ¿Pasaré semanas con molestias en la vagina? ¿Durará mucho la intervención? Seguro que las dudas se te han ido amontonando en la cabeza, pero tranquila, que te las vamos a despejar todas. Lo primero que debes saber es que el láser ginecológico es una solución efectiva y segura a los problemas que hemos enumerado anteriormente. No deberás desplazarte a ningún hospital ni nada por el estilo, la intervención es muy sencillita y rápida y la realizan las propias profesionales de Clinimur. Nuestro equipo está formado sólo por mujeres como tú, que experimentan y sienten lo mismo que experimentas y sientes tú.
